Desde hace ya varios años, la escena de la música electrónica acuñó el término PLUR, como bien sabemos son las siglas de Peace, Love, Unity, Respect. Más allá de cuatro palabras para nosotros los raves significa un estilo de vida, y vaya que lo disfrutamos al momento de estar en medio de un festival intercambiando Kandis, usando ropa multicolores, tomándonos fotografías con personas de otros Estados de la República e incluso de otros países. Es una vibra fantástica y un sentimiento conmovedor cuando vivimos el PLUR al máximo, pero, ¿Por qué despreciamos a los demás géneros?
Hablando de otros géneros, tal vez recuerdes haber escuchado a tu amigo rockero referirse a la música electrónica a través de frases como “eso no es música”, “los DJ’s no son músicos, solo conectan una USB y ya”, “solo el rock es música y cultura”, es irritante, ¿No? Al no conocer la música electrónica más a fondo como nosotros, es muy sencillo hacer ese tipo de comentarios, pues nosotros sabemos bien el talento de DJ’s y productores como Calvin Harris, Daft Punk, Gryffin, Illenium o Borgore, DJ’s que nos han mostrado su capacidad para tocar muchísimos instrumentos que, no tan irónicamente porque la música se compone de los mismos instrumentos y notas, utilizan en el rock.
¿Por qué nosotros que conocemos, vivimos y sentimos el PLUR, hacemos lo mismo con los demás géneros que no son música electrónica? Seguramente en alguna época de tu vida despreciaste al pop por ser “tan repetitivo” o por sus letras, ¡Y qué decir de la música en tendencia! El reggaetón, los comentarios son todavía peores y menospreciamos el arte y talento de otros músicos que no tocan lo que a nosotros nos gusta.
La música está en constante evolución, de otra forma escucharíamos los mismos instrumentos con los que tocaron en 1920, 1940 o quizá la música de moda seguiría siendo el rock, el Disco o el pop. Los músicos y creativos a lo largo de la historia nos han regalado ritmos increíbles y nos han dado lo que como tal hoy conocemos como música electrónica, esa música que para otros era ruido en su época hoy es toda una industria y todo un género musical con sus innumerables subgéneros.
Un ejemplo de dicha evolución ocurrió cuando Deorro comenzó a tocar a Los Tucanes de Tijuana en sus sets, cuando Steve Aoki comenzó a mezclar “El Sonidito” e incluso “Por tu maldito amor” de Vicente Fernández. Uno de nuestros DJ’s favoritos nos mostró que el PLUR es posible al colaborar e incluso invitar a Bad Bunny a Tomorrowland, presentación que rompió paradigmas para este festival. Es más, el mismo Tomorrowland invitó a J Balvin en una presentación individual en uno de sus escenarios con un lleno total.
¿Por qué nosotros que conocemos, vivimos y sentimos el PLUR, hacemos lo mismo que hacen las personas con gustos musicales diferentes con los demás géneros que no son música electrónica? ¿Por qué no aplicamos el mismo PLUR con otros géneros? ¿Cuántas veces hemos criticado colaboraciones de grandes DJ’s con otros artistas de otros géneros? La música es música, se goza, se disfruta, se baila y se vive. Dejemos de lado la cultura del hate hacia algo que no entendemos o que simplemente no nos agrada, si algo nos ha enseñado la música electrónica es a disfrutarla sin juzgarla.
El PLUR va más allá de intercambiar kandis, vestimentas exóticas, amigos de otros países y fotos formando corazones con las manos, el PLUR es coexistir con los demás géneros de música (aunque no sean de nuestro agrado), amar a la música por lo que es, por lo que nos hace sentir y lo que nos hace disfrutar, ¿O me vas a decir que jamás has bailado cumbia, salsa o reggaetón en una fiesta? Es mantener esa unidad que nos ha enseñado la música a través del lenguaje universal, y sobre todo, es respetar la demás música sin menospreciar ningún género.
